Cultura y Civilización: El Debate Franco-alemán
Prof: Francisco Astudillo Pizarro
Material complementario a las clases sobre la temática cultura.
Otra oposición relevante de
destacar es como planteamos anteriormente es
la de cultura y civilización.
Dicha oposición de significado
surge también en el sigo de las luces y deriva de la utilización del término
civilización en un mismo sentido del de cultura, esto surge en Francia ya en el
siglo XVIII asociado a la refinación de
las costumbres o los “buenos modales” también y muy ligada a la idea de progreso,
casi el alma de la ideología ilustrada y que planteaba como un supuesto
esencial la idea de “avance”, de un devenir de superación de los estados, en
esta lógica la “civilización” viene a representar un “estado” de la humanidad
en la que la ignorancia a sido abatida, superada y por tanto las costumbres y
toda producción humana esta en su apogeo. No obstante ser el máximo estado de
la humanidad no es definitivo, la civilización es siempre un proceso en
desarrollo y por ello perfectible. Esta idea gana hegemonía en el pensamiento
social francés de esta forma una linealidad de concepción lógica se instala
tras el término civilización, y ésta lógica se encuentra fundada en el hecho de
que se concibe “una” civilización, valida para toda la humanidad en “una
evolución social”.
De esa forma en los albores del
siglo XIX la forma sinónima de cultura y civilización era ya muy extendida y
promovida en Francia.
l |
Finalmente la idea de cultura y
su asociación al término civilización fue una importación francesa relacionada
a conductas y prácticas refinadas promovidas por la nobleza en Francia
Para encontrar una mayor adhesión
a concepciones relativistas debemos mirar hacia Alemania, de la mano del
término Kultur el que aparece en el siglo XVII
de una manera muy similar a la
manera francesa pero con un desarrollo propio, con sus propios tiempos y
particularidades lo que llevó a configurar una diferenciación propiamente
alemana en la concepción de cultura debido a la dialéctica[4]
cultural que se dio entre burgueses y aristócratas, los primeros optaron por el término Kultur propiamente alemán lo
asociaban a profundos valores del espíritu y a la originalidad de su nación, lo
segundos optaron por Civilización con una orientación más francesa del
concepto.
Las particularidades de esta
dialéctica llevo la diferenciación del campo semántica a una variedad de
dimensiones culturales y sociales, las que sólo son comprensibles si observamos
analíticamente el contexto en el que surgen, de esta manera las ideologías
políticas y los estratos sociales entran a jugar un importante rol en la explicación del debate interno de Alemania
en la consolidación del término Kultur o cultura[5].
Por ejemplo, los burgueses
alemanes ya para el siglo XVIII se
armaban del término Kultur para atacar a los aristócratas de “afrancesarse” en
sus costumbres, de mirar para Francia, para construirse culturalmente y con eso
de renegar de su identidad alemana al imitar las costumbres “civilizadas” de la
corte francesa, puesto aristócratas de origen noble optarían no sólo por las
prácticas francesas sino que también por la utilización de la idea de
civilización. Hecho considerado como una demostración de superficialidad por
parte de los aristócratas franceses. Francia había conquistado el triunfo en su
proyecto ilustrado y moderno, políticamente había triunfado instaurando la
república y el nuevo régimen[6],
todo esto configuró un clima de éxito en el que fue desarrollándose un
refinamiento en las costumbres, situación que fue dando cuerpo a la idea de
civilización, concepto y noción rechazada por los burgueses alemanes y muchos
de sus principales intelectuales como Immanuele Kant.
Es así en cambio como la
burguesía alemana optaba por una tendencia más intelectualizada apoyando
fuertemente a sus pensadores. La burguesía se decantaba por el “cultivo” del
espíritu y del intelecto, veían en estas actividades el trasfondo indiscutible
de los más profundos y originales valores.
En una mirada más amplia y de carácter socio-histórica debemos
reparar en los contextos sociales y políticos en los que se desarrollan
conceptual e ideológicamente los términos y el debate cultura-civilización.
Por una parte Francia había sido
protagonista de una de las mayores revoluciones de la historia y constituía una
unidad nacional, un estado nacional robusto y orgullosamente homogéneo y con su
concepción cultural anclada en el término “civilización” como triunfo moral e
intelectual de una nación plenamente moderna, es esta la concepción que con admiración
observaban los aristócratas y nobles alemanes quienes representaban una opción
política conformista (en el contexto alemán).
Centrando ahora el foco de
nuestro análisis en Alemania (de la época) vemos una fragmentación[7]
de pequeños estados, por esta razón los pensadores alemanes burgueses levantan
su propia cultura como elemento cohesionador del pueblo alemán con el objeto de
preparar el camino para una unificación de los múltiples estados alemanes. Esta
idea era particularista y se contraponía radicalmente a la de los pensadores
franceses y sus seguidores dentro y fuera de Alemania ya que para la incipiente
corriente de la cultura alemana la cultura tenía que ser tratada en plural,
para ellos no había “una cultura”, una cultura humana universal como en el caso
de la corriente francesa sino que había culturas, fundada cada una en su
especificidad de esta forma se oponían a la negación francesa de las
particularidades culturales por considerarlas “Poco civilizadas” o en muchos casos“salvajes”.
Johann Gottfried Herder en 1774
promueve la idea de Volksgeist o genio de cada pueblo, en otras palabras la
identidad específica de cada pueblo siempre se decanta por la diversidad
cultural y con ello la riqueza humana en contra del universalismo totalizador.
Paradojalmente la diversidad
cultural que enarbolaban los pensadores alemanes que llamaba a poner atención
en la propia cultura alemana, distinta de las otras culturas pudo haber sido el
comienzo, el germen del nacionalismo alemán en el pensamiento social y con ello
tal vez la cuna de su etnocentrismo también totalizador que terminaría en
trágicos sucesos a mediados del siglo XX.
[1]
Para comprender éste concepto ver secciones posteriores de éste documento.
[2]
Más adelante ahondaremos en el hecho de que en Francia se haya extendido la
utilización del término civilización en lugar del término cultura que fue
adoptada en mayor medida por Alemania.
[3]
Rousseau tendrá una toma de posición claramente identificada con la naturaleza
(en el deber ser) en la posición entre civilización y naturaleza.
[4]
Asociamos acá la idea filosófica de dialéctica al conflicto, en éste caso al
conflicto entre dos grupos sociales divergentes en el seno de la sociedad
alemana.
[5]
Lo que asu vez nos da la oportunidad de aplicar las discusiones sobre
estratificación social tratadas en clases.
[6]
La conformación del estado republicano no deja de ser un elemento relevante, de
hecho el estado francés heredado de la revolución adquirirá la categoría de
paradigma.
[7] Nos
sirve recordar que la unificación del estado alemán se produciría recién en
1871.
No hay comentarios:
Publicar un comentario